viernes, 6 de junio de 2008

JUNO

A priori, cuando te dicen que vas a ver una comedia americana de adolescentes en la que la protagonista se queda embarazada, te echas a temblar. Son los prejuicios, porque esta película demuestra que cualquier tema o edad puede dar como resultado un trabajo más que respetable... además de cumplir el tópico de menos es más.

En el caso de “Juno” (diosa de la maternidad en la mitología romana), es fácil adivinar teniendo a Jasón Reitman como director, y sobre todo gracias a su anterior trabajo “Gracias por fumar”, que el tono entre irónico y sarcástico del material está garantizado. Con Ellen Page estaba un poco más despistado. A pesar de ser reconocida internacionalmente por su anterior trabajo en “Hard Candy”, la película no acabó de engancharme. Me parecía que tenía demasiados puntos en común con “Funny Games”, y que la interpretación de Arno Frisch era devastadora e incomparable. Además, la escena final de “Hard Candy”, hizo que para mi perdiera toda la credibilidad el personaje (todo estaba perfectamente justificado, haciendo que se viera el “cartón” al guión). Pero en el caso de “Juno”, el personaje le queda a Page como un guante. Es más, después de vista, me cuesta imaginarme a otra actriz haciendo ese papel. El de la adolescente de dieciséis años inteligente, algo freaky y cargada de sentido del humor que se enfrenta a un embarazo no deseado.

La película tiene una estructura narrativa muy sencilla. Todo gira alrededor de Juno. El planteamiento se hace casi desde el primer minuto. Esas secuencias iniciales en las que la protagonista se hace las pruebas de embarazo. Además también queda definido el tono. Lo mejor es que esta adolescente y todos los que les rodean tienen un sentido positivo de la vida que traspasa la pantalla. La película huye de toda pretenciosidad. El lenguaje (tanto visual como textual) es fresco, directo y realista. La trama se abre cuando Juno ayudada por su amiga Leah, decide dar el bebe en adopción. Para ello busca a los padres “perfectos”, pero no tarda en descubrir que la perfección no existe. En este punto conocemos a la acomodada pareja elegida a través de la relación con ellos. Pero el punto de vista se mantiene en todo momento con ella. Se ve involucrada en situaciones que se le escapan de las manos por su edad, pero que ella es capaz de capear con soltura. Por otro lado su “relación” con el padre de la criatura, Michael Cera (el tímido de “Supersalidos”) es tierna y enternecedora, como conexión con la vida que corresponde a una adolescente de su edad. Tal vez esté ahí (además de en su sentido del humor) la clave de la película. Contraponer situaciones de adulto a una niña de dieciséis años, y ver como se enfrenta a ellas con más cabeza que la mayoría de los adultos. Está arropada además por unos fantásticos secundarios, especialmente Jennifer Garner como madrastra y Jasón Bateman como padre, y por una música muy acorde con el personaje. La película tiene mucho que ver con aquel cine independiente de los noventa basado en los diálogos y los personajes, que se fueron comiendo los grandes estudios hasta hacerlo casi desaparecer.

Para conseguir este resultado tan “normal” la película tiene una base muy sólida apoyada en el fantástico guión de una camarera striper de nombre artístico Diablo Cody, que creo que utiliza a Juno como alter ego (muchas de los fantásticos diálogos me los imagino en una joven algo mayor). Lo cierto es que Cody se ha llevado el Oscar al mejor guión original. Al parecer la encontraron a través de un blog en tono cómico que tenía en Internet. Luego le propusieron escribir un guión... y lo demás ya es historia. Siempre criticamos el cine americano, pero su cultura (la anglosajona en general) tiene cosas que ya quisiera la nuestra. Una situación similar a la de Cody es completamente impensable en nuestro anquilosado y rancio cine patrio. Y es que más que nos pese, y superproducciones aparte, Estados Unidos sigue siendo el país de las oportunidades, y son conscientes de que cualquiera puede ser un filón si tiene algo que contar.

Víctor Gualda.

21 comentarios:

Anónimo dijo...

a mi me parecía que estaba viendo el mismo personaje en las dos pelis pero en situaciones distintas. En esta Page sale de caperucita roja, y si no recuerdo mal la portada de Hard Candy tambien la sacaba de caperucita roja, además en ambas hace un personaje un poco lolita, porque en esta seduce claramente al marido, que se deja llevar por la pitopausia.

Anónimo dijo...

La peli no la he visto, ví una cuña en la tele y como era de la versión doblada, la niña en cuestión con esa voz de perfecta locutora de spot publicitario me pareció bastante redicha intragable... Pero todo el mundo me ha hablado muy bien de la película, así que dejare prejuicios aparte y pillaré el dvd.

Mi comentario es para decir que estoy totalmente de acuerdo (vaya por Dios) con todo lo que apuntas sobre los americanos y su tierra de las oportunidades... ya quisiéramos nostros que por aquí se valorara, se apoyara y se fomentara la creatividad la mitad de lo que lo hacen los gringos. Aquí que tengas cosas que contar y que seas especial contándolas les trae al pairo... con razón están despaereciendo todas las carreras de humanidades,mejor animar a las mentes frías y prácticas, tengamos millones y millones de hombrecillos de empresa mientras que los espíritus creadores se mueren de asco detrás de una barra o como teleoperadores...

pitbull

Anónimo dijo...

Nada que ver Juno con Hard Candy,y si guardan parecido es por esa portentosa actriz y por otros aspectos superficiales.
En mi opinión,una de las pelis del año.
Y en lo que planteas en el último párrafo, los americanos no sólo destacan sobre nosotros en número, sino que es una cultura con una habilidad comunicativa que no tenemos.Un pais joven, sin mitos tan antiguos, se los han fraguado en el cine y el espectáculo.
Hay que bajar los brazos y reconocer que son los mejores en ésto, y si no lo demuestran más es porque no quieren.
Y cuando quieren, nos regalan maravillosas películas como Juno.
Zero en conducta

Anónimo dijo...

Margüita dijo....

Acabo de ver la película, así que vengo con las ideas fresquitas. Por supuesto, estoy contenta. Eso es lo que consigue la película, dejarte contenta. Buena interpretación, buena música, una bonita historia y un final con perdiz.
Contenta, pero no convencida. Yo también veo mucho de Hard Candy, y una Lolita en toda regla (no ha sido ella quién ha hecho a Mark replantearse su matrimonio?). El personaje tiene 16 años.... y creo que la madurez de nuestra protagonista excede en todo momento los límites de la credibilidad. EEUU tiene un serio problema de embarazos prematuros. Un 40% de las mujeres blancas junto con un 70% de mujeres negras tienen un embarazo antes de los 20 años. ¿Alguieni se atreve a estimar la tasa de finales felices?
Creo que tanto positivisto cinematográfico es el que nos lleva a pensar en USA como el país de las oportunidades. Uff... la cantidad de artistas-camereros que hay por estas tierras esperando dar el gran golpe!!! No nos engañemos, que oportunidades "haberlas, hailas", pero aquí no se le regala nada a nadie. Tampoco a esas mentes frías y prácticas, que a veces, también se pudren detrás de una barra, o como teleoperadores.


En resumen, que la peli me ha encantado. Pero creo que nos confunde y nos lleva a pensar en rosa y a extrapolar tanta felicidad a otros derroteros. Entre más de 304 millones de habitantes que pesan sobre este país, es fácil encontrar alguna historia con final feliz. Pero por desgracia, no hay tantas Cody ni tantas Juno como debería.

Anónimo dijo...

he vivido en Estados Unidos, concretamente en Nueva York y toda la razón con las toneladas de camareros actores, camareros escritores, camareros escultores (conocí montones)gente con business administration poniendo copas no recuerdo ningún caso, pero, como tu dices haberlos hailos... Sé que es un país que no regala nada y cuando hablo de oportunidades no hablo de regalos sino de justicia, creo que por supuesto si se tiene verdadero talento es más fácil que alguien apueste por ti (si te lo curras,claro, no hay un caza talentos que se encargue de llamar a las puertas de las casitas prefabricadas de cualquier suburbio de wisconsin)Aqui la mayoría de los jefes de casting se limitan a tirar de archivo que es más cómodo y rara vez se molestan en ver obras en teatros alternativos o echar un vistazo a algún corto con caras desconocidas.Creo que la clave puede estar en lo que comenta Zero, que es un país muy joven sin mitos y casi sin historia por eso su mitología es el cine, las letras, el espectáculo en general.Son como niños para casi todo (lo que a veces resulta desastroso) y por eso aunque en esos campos destacan, en cultura general dan bastante verguenza...
De todas formas hace ya años que viví en el village y tu visión seguro que es más fresca.

Ah y no tengo nada en contra de las mentes fría y prácticas (dónde estaría yo sin ellas)

Anónimo dijo...

Margüita, ya que estás por allá te recomiendo, si tienes ocasión, de ver "Gummo"(1997) de Harmony Korine que no se ha editado en España.
No sólo es diferente a nivel narrativo, sino una hermosa película sobre la juventud de la América más profunda.
Es una de mis pelis favoritas y tal vez se acerque más a esa realidad sociológica de la que hablas.
En lo que respecta a la seducción en "Juno", tal vez sea el aspecto donde se le vea más el plumero al guión, aunque afortunadamente lo emplea para otro fin:que el marido reviva esa prefase de enamoramiento, su olvidada juventud y que decida cambiar y que para Juno sirva de acicate para tomar un papel activo y el darse cuenta que las relaciones hay que alimentarlas.
Ya está
Zero en conducta

Anónimo dijo...

dos cosas: la primera, que no se ha utilizado de manera activa el tema de la seducción, simplemente es un conflicto en el personaje secundario que por una parte hace que evolucione la trama, las decisiones futuras de la protagonista. Sabemos que como dice McKee que "la medida del valor del deseo de un personaje es directamente proporcional al riesgo que esté dispuesto a correr para conseguirlo; cuanto mayor sea el valor, mayor será el riesgo"... es decir que cuanto mayor conflicto genere la decisión del tipo, más crecera el conflicto central, y por ende la historia. No olvidemos que el conflicto principal no es el embarazo, que no supone un trauma para la protagonista, sino el giro que da el marido y las repercusiones en la trama principal y la protagonista... uf, vaya palique...

por otro lado, me alegro que nos sintamos parte de esa tradición cultural de siglos, pero la realidad es que la mejor literatura, el mejor cine, el mejor teatro etc, tal vez por tener una visión más infantil precisamente, son anglosajonas. Tal vez porque su cultura no está tan encorsetada... y no nos equivoquemos, la mayoria de los "grandes" del cine americanos y de la literatura son grandes fans de la MEJOR tradición europea de su campo. No nos creamos con una superioridad moral que no tenemos, que los americanos no dejan de ser hijos de inmigrantes europeos. La diferencia en realidad estriba en que ellos entienden la cultura como un negocio a explotar, y no como una pieza de museo en la que hay que perder el tiempo analizando su sentido último.
Bi.

Anónimo dijo...

Bueno... ¿cuando dices anglosajonas te refieres a norteamericanas o englobas Gran Bretaña? porque soy fan de la lteratua gringa y, por supuesto de su cine pero en cuanto al teatro, quizás la interpretación y dirección le deban mucho a la escuela norteamericana pero autores como Ibsen, Chejov, Strindberg... uff son mucho decir y por muy apolillados que parezcan todavía no ha surgido ningún contemporaneo que desbanque a los viejos europeos. Con tremendas glorias americanas como Williams o Miller (que por cierto tambien empiezan a sonar muuuy lejanos) Aunque si entramos en teatro la polémica sería otra.

Bueno que me lío, en definitiva que creo que los americanos son muuuy buenos en el terreno de la creación (sea el soporte que sea) y que la vieja Europa vive mucho de su rentas y sus clásicos pero sigue sin pescarles el truco.

Pitbull

Anónimo dijo...

Chejov? Strindberg? si cuando murieron ellos (1904 y 1912) el cine estaba dando sus primeros pasos... si hasta Shakespeare es más moderno que ellos... esta bien eso de mitificar a los clásicos, pero ha llovido mucho desde entonces e incluso las degeneraciones de sus métodos de trabajo han quedado anticuadas. Para ver autores realmente originales habría que remontarse a los griegos y no creo que sea plan... El estilo narrativo tanto del cine como de la literatura afortunadamente ha evolucionado, y los yanquis y los sudamericanos (que también fueron descubiertos por la misma época) dan mil vueltas al pesado y renqueante estilo trascendente europeo. Por supuesto para gusto colores, pero hay que tener valor para no reconocer los méritos de esos "niños grandes" sin miedo a hacer el ridículo y sin la mochila de la "tradición" a las espaldas.

Anónimo dijo...

margüita dijo...

Ya sabía yo que estábamos hablando de NY!! NY es la isla Europea de USA y tiene poco o nada que ver con el resto de este mostruo de 56 estados. Si nos centramos en NY el argumento del arte y la creatividad parecen más reales. Pero en NY sólo viven 9 de los 300 millones.
Por otro lado, conociste también montones de camareros? Y los careros de NY qué querían ser, camareros???
Y no quiero decir que aquí la cosa no esté un poco mejor. Y mucho menos que allí no esté mal (si no, qué hago yo aquí?)... pero la tasa de frustración habría que medirla en términos reales, entre aquellos artistas que se han labrado un futuro de artistas que no han tenido. No vale con decir "quiero ser actriz" y tener un CV de un curso de verano en la escuela de Cristina Rota, por decir algo. Que por querer, yo quería ser astronatura, pero me da pereza conducir naves espaciales.

Con mi comentario de Lolita me refería más bien al paralelismo con Hard Candy, en la que también la historia arranca con una seducción adolescente-adulto.

anotado! Gummo ya está en mi lista!

Anónimo dijo...

vamos a ver Bi... está claro que me expreso fatal... y dale: que sí, que yo también creo que los americanos nos dan cien mil vueltas en esto y que el complejo de intensidad europeo me pone de los nervios. Debe de ser que como te gusta tanto que te lleven la contraria no te das cuenta cuando te están dando la razón...

Y de acuerdo Margüita con el tema de la coherencia, no por hacer un curso de verano con algún gurú, una es actriz, hay que tener aptitudes y actitudes, currar mucho, amar mucho la interpretación,sentir de determinada manera y mirar de determinada manera al mundo... lo de la frustración... pues cada uno tiene que hacerse responsable de la suya, yo he tirado la toalla y te aseguro aunque te suene pedorra que soy muy buena... pero para todo en esta vida existe el factor suerte y el factor circunstancial,(y el factor tesón, tal vez) mi frustración me la como con patatas pero dejame soñar que a lo mejor en un universo paralelo (llámese USA o Pirimpimpum) existe la remota posibilidad de que si vales te luce el pelo

Y si te da pereza conducir naves espaciales seguro que no tenías tanta vocación de astronauta...

Anónimo dijo...

y con tanto apasionamiento me estoy empezando a achantar otra vez, creo que en este blog voy a mutar de nuevo a caniche...

Uff...

Anónimo dijo...

Creo que aquí hay dos grupos de personas (en términos muy generales, y aunque esté feo generalizar). Los que se han creído el sueño americano de la sociedad abierta con igualdad de oportunidades, y los que no. Los primero se jactan de sus méritos, y se responsabilizan de sus fracasos. Sus fracasos son suyos y sólo suyos, nunca del sistema (abierto e igualitario). Por eso se quejan menos? Puede.
Los segundos han dejado de soñar. Mis vecinos negros no sueñan con ser artistas (por mucho Obama que haya apuntando al despacho oval). Ni siquiera sueñan con ser camareros (vivo en una ciudad con un 42% de población negra y milagro! no hay camareros negros!).

El caso es que en España nuestros fracasos no son nuestros. Son del sistema, de la sociedad, del gobierno, o del portero si hace falta. Hay mucho de "quiero ser escritor", que luego no coje un libro más que para apoyar un vaso.
Y luego la culpa es del sistema?
Querer implica más que decir que se quiere (alabado sea Fromm). Así que te doy la razón. Seguro que yo no tenía vocación de astronauta.
Y que conste que con esto no quiero decir, ni mucho menos, que las barreras sistémicas y el factor suerte no existan, eh? De eso está plagado (y a mi, me dan de comer)
Pero si eres muy buena, tal vez estás a tiempo de recoger la toalla, que seguro que sabes dónde la dejaste, y seguir soñando. Porque esa será la única manera de no estar segura de que tu sueño no se va a hacer realidad. (joe, esto último parece sacado de "quién se ha comido mi queso"!)

Anónimo dijo...

Margüita dijo...

Ni se te ocurra!! (lo de ponerte el traje de caniche, digo) ;-)

Anónimo dijo...

vale, lo de caniche lo dejo de momento (buscaremos algo intermedio), y lo de soñar... pues sigo soñando pero me cansé de luchar y que conste que no me quejo y que sé que aparte de la suerte la única responsable de lo que pasa o no pasa en mi vida soy yo... y que me río yo de los grandes artistas que atestan Malasaña y que como tú dices no cogen un libro... y que bueno que esto es un blog de cine pero si de paso hablamos de sistemas, oportunidades y averías propias pues se va animando

Cocker que era caniche y que durante un par de semanas se creyó pitbull

Anónimo dijo...

Esto parece "Hablar por hablar".
Ahí va mi mensaje autoayudante:
no importa el éxito, si te gusta actuar y las demandas de tu vida te lo permiten, date el lujo de ser malo y no avergonzarte.Disfruta haciendo lo que te gusta, aunque sea a pequeña escala y sin ganar un duro, que hay gente por ahí que lo hace, incluso en Malasaña.
Zero

Anónimo dijo...

no me mal interpretes Zero, en Malasaña hay gente cojonuda y super válida en lo que hace, y no es una cuestión de exito sino de poder vivir de lo que uno ama (y no me refiero a chupar del cónyuge)

la verdad es que sí, esto parece hablar por hablar... o llorar por llorar porque tampoco es para tanto lo que pasa es que a veces me pongo intensa y acabo creyéndomelo...

En cualquier caso gracias mil por los consejos

Anónimo dijo...

sólo matizar un par de asuntos... Diablo Cody no pertenecía al sistema de estudios, sencillamente escribió un blog y algún espabilado pensó que era una tipa con potencial. Esa situación no la veriamos en nuestro país, ni en europa en general... el tanto por ciento de blancas que se quedan embarazas no cambia el hecho de que es una película positiva, sencillamente se ha cogido un tema que tratado de otra manera podría ser dramático, pero gracias a la magia del cine, y a unos códigos universales, se puede ver en cualquier parte del mundo y esbozar una sonrisa. Tampoco me importan los tantos por ciento de fracaso del sueño americano. Todo el que va a NY o LA sabe que la mayoria no va a triunfar, pero también saben que hubo gente que lo hizo sin ser amigo-vecino-primo-amante o cuñado de nadie. El tanto por ciento de negros en los Estates, y su peso en la sociedad tampoco es un tema en el que podamos opinar con conocimiento de causa, para eso ya está Spike Lee que ultimamente se dedica a putear a Eastwood por no meter negros en sus dos últimas películas. Y desgraciadamente, responsabilidades personales aparte, el sistema es un desatre discriminatorio donde vales tanto como tienes aquí, y en Estados Unidos...
Bi.

Anónimo dijo...

Margüita dijo...

Sólo aclarar un par de asuntos, como tu dices...

J.K Rowling y su Harry Potter sería el ejemplo europeo de Diablo Cody, si quieres. Así parece que alguna vez aquí también se da el milagro.

El porcentaje de embarazos prematuros no impide, por supuesto que no, inventarse una historia con final feliz que haga sonreír en todo el mundo. Pero esa historia con final feliz tampoco impide que yo vea por todos lados tintes republicanos que incitan a la gestación para la adopción en adolescentes de 16 años como alternativa "feliz" al aborto. Un argumento muy pro-life bajo el slogan "todos los bebes quieren nacer" y "tu hijo tiene uñas", justificado con una historia tan bonita como irreal. Espero que las adolescentes de este y cualquier otro país sepan sonreír al ver la película, pero también sepan discernir entre realidad y ficción (serán todas tan espabiladas Juno?)

No creo que nadie haya cuestionado que el sistema discrimine (responsabilidades personales incluídas, añado yo). Pero no veo la gran diferencia USA-Europa de la que hablas. Seguro que Sofía Coppola lo tiene más fácil (aunque vaya acumulando fiascos tanto como actriz y como directora) que cualquier otra chica de academia. Igualito que en España. Y me parece injusto no reconocerle el mérito a gente como Pablo Berger, por ejemplo, y otros "jóvenes" directores, que deben sus logros a sus trabajo personal y no tienen ningún primo-amante-padre en el mundillo.

Anónimo dijo...

Margüita dijo...

Y ya paro con el tema del aborto. Es que hace poco me vi "Lake of fire" de Tony Kaye (es el director de American History X, si no me equivoco), y sigo dándole vueltas al tema. Después de tragarme no sé cuántas horas de documental, y otras muchas más reflexionando sobre el tema, la alegría-frivolidad de Juno me dejó perpleja.

Ya, ya, ya lo dejo!!

Anónimo dijo...

No es por añadir leña, pero creo que más allá de prácticas pro o antiabortistas (ambas son un tanto ridiculizadas hasta incluso en la misma secuencia) en Juno hay implícita una idea de base, común a mucho cine indie, que no es otra que la asunción de que todo individuo es especial y único.
Me resulta un tanto tendencioso y hasta pesado, y si Juno es genial e irrepetible, también es diferencial el personaje de M.Cera (portentoso actor, por cierto), Mark tiene derecho a ser quien quiso y J.Gardner a ser madre, regalo de ese angelito (Juno) que se cuela en su cotidianeidad tan poco efusiva.
Así, más allá de consideraciones de tipo ético o religioso (que no se las plantea nadie en el film), subyace el derecho individual a tener lo que uno quiera (se lo haya dado o negado la naturaleza o el ambiente), que no deja de ser algo de lo que se ha discutido en este foro.
Zero