En Alemania durante la década de los ´70 hubo un grupo de jóvenes que luchó contra el estado alemán en lo que percibía como el nuevo rostro del fascismo (imperialismo liderado por EE.UU), la generación que protagonizó el periodo nazi vs sus hijos, este enfrentamiento tuvo su culmen tras la detención de los líderes de la RAF y el juicio de Stammheim (cárcel construida para albergarles), que duró 2 años, la sentencia fue cadena perpetúa. Tras esta sentencia se sucedieron secuestros, muertes, detenciones, en lo que se ha denominado como uno de los períodos más convulsos de la historia alemana contemporánea; el Otoño alemán.
La primera de las películas (R.A.F. facción del ejercito rojo) intenta desde varios puntos de vista (psicológico, sociológico e histórico) relatar una década de historia alemana siguiendo un enfoque que denominaron “fetzedramaturgie” (dramaturgia triturada), que viene a brindar al público un rompecabezas que el público debe reconstruir para tener una imagen general. Para el rodaje se utilizó mucho la cámara en mano lo cual da más impresión de realidad a las persecuciones, y sobretodo hace más cercana al espectador la “paranoia” de los militantes del RAF que el estado les está vigilando a todas horas.
A pesar de este supuesta imparcialidad de partida (al menos eso pretende) hay una serie de cuestiones que no me parecen verosímiles, el director y guionista aceptan la versión oficial del suicidio de los militantes de la RAF en Stammheim, no obstante, nunca se ha aclarado como Baader pudo introducir una pistola en una prisión de máxima seguridad, dos de los muertos fueron por herida de bala. Además, hubiera sido muy difícil –si no imposible– para Möller haberse podido infligir las cuatro puñaladas que se le encontraron cerca del corazón. Otro punto que resta veracidad a la trama es que nos presenta a estos militantes como unos jóvenes incautos que durante el juicio solo se dedicaron a insultar y obstaculizar el proceso judicial sin respetar a las autoridades, cuando el “El proceso” nos muestra todo lo contrario, que estos jóvenes eran considerados por las autoridades académicas como superdotados, terminaron varias licenciaturas con alta graduación, y durante el juicio esgrimieron argumentos filosóficos y políticos que la magistratura en muchos casos no podía contra argumentar.
En definitiva “RAF facción del ejercito rojo” me parece un buen producto para despertar el interés sobre lo acontecido en Alemania durante la década de los ´70 pero no para darle luz, en cambio “El proceso”, con carácter de documental, si sirve para entender estos hechos históricos, aunque solo se centre en el juicio de Stammheim. Tras ver estas películas y varias lecturas tengo la impresión que estos sucesos siguen siendo piezas de un puzzle que la sociedad alemana no ha reconstruido, teniendo en cuenta que llegaron a ser uno de cada cuatro alemanes los que apoyaban a la RAF durante el Otoño alemán (más de siete millones de alemanes!).
Eregoyan.
La primera de las películas (R.A.F. facción del ejercito rojo) intenta desde varios puntos de vista (psicológico, sociológico e histórico) relatar una década de historia alemana siguiendo un enfoque que denominaron “fetzedramaturgie” (dramaturgia triturada), que viene a brindar al público un rompecabezas que el público debe reconstruir para tener una imagen general. Para el rodaje se utilizó mucho la cámara en mano lo cual da más impresión de realidad a las persecuciones, y sobretodo hace más cercana al espectador la “paranoia” de los militantes del RAF que el estado les está vigilando a todas horas.
A pesar de este supuesta imparcialidad de partida (al menos eso pretende) hay una serie de cuestiones que no me parecen verosímiles, el director y guionista aceptan la versión oficial del suicidio de los militantes de la RAF en Stammheim, no obstante, nunca se ha aclarado como Baader pudo introducir una pistola en una prisión de máxima seguridad, dos de los muertos fueron por herida de bala. Además, hubiera sido muy difícil –si no imposible– para Möller haberse podido infligir las cuatro puñaladas que se le encontraron cerca del corazón. Otro punto que resta veracidad a la trama es que nos presenta a estos militantes como unos jóvenes incautos que durante el juicio solo se dedicaron a insultar y obstaculizar el proceso judicial sin respetar a las autoridades, cuando el “El proceso” nos muestra todo lo contrario, que estos jóvenes eran considerados por las autoridades académicas como superdotados, terminaron varias licenciaturas con alta graduación, y durante el juicio esgrimieron argumentos filosóficos y políticos que la magistratura en muchos casos no podía contra argumentar.
En definitiva “RAF facción del ejercito rojo” me parece un buen producto para despertar el interés sobre lo acontecido en Alemania durante la década de los ´70 pero no para darle luz, en cambio “El proceso”, con carácter de documental, si sirve para entender estos hechos históricos, aunque solo se centre en el juicio de Stammheim. Tras ver estas películas y varias lecturas tengo la impresión que estos sucesos siguen siendo piezas de un puzzle que la sociedad alemana no ha reconstruido, teniendo en cuenta que llegaron a ser uno de cada cuatro alemanes los que apoyaban a la RAF durante el Otoño alemán (más de siete millones de alemanes!).
Eregoyan.
1 comentario:
Aún no he visto ninguna de las dos propuestas.Siguiendo tu consejo,prestaré atención a "El proceso".
Esa época fue especialmente interesante para el cine alemán,recomiendo(motivadas por lo que supuso el RAF y movimientos análogos)"El honor perdido de Katharina Blum" y "Las hermanas alemanas".
Por cierto,hojeé hace ya mucho(en la adolescencia)escritos de Ulriche Meinhoff.Y efectivmente,de lucidez e inteligencia iban sobrados
Zero
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